Muchas cosas ya no nos sorprenden pero deberían.
Tratemos de resumir este semana al menos en 2 partes:
Pocas veces vivimos tan orgullosos el resultado o la consecuencia de un buen trabajo.
Presentarnos con 2 escuelitas menores y una mayor, contar con los padres de hinchada, el debut de la mayoría de los chicos, la alegría con la que juegan, todo contagia y mucho.
Se veían camisetas blancas por todo el club.
Esa podría ser una primera lectura.
Nunca importa el resultado, pero si te permite tener una medida del grado de evolución de lo que estas enseñando.
La escuelita menor evoluciono sorprendentemente (o consecuentemente) al punto de superar a todos los equipos que enfrentaron, demostrando los conceptos básicos como el correr para adelante, contacto con el rival y con el pasto, superados ampliamente.
El trabajo de Nico y Rosita es por demás excelente.
Y en mi caso, puedo y quiero hablar de la escuelita mayor.
Probablemente exagere, pero creo que están jugando a un nivel altísimo.
Iniciamos contra Argentino de Bahía y lo superamos ampliamente. Debo confesar que siempre tengo ese miedo escénico antes de cada primer encuentro, pero sin fundamento.
Pero el mejor partido fue el segundo, la derrota contra Pucara: Que juegan a otro nivel es hasta lógico, pero lo increíble es como se dio el partido. Durísimo. Nunca nos tacklearon tanto, pero lo increíble fue como nuestros chicos se enojaban y no arrugaban, a pesar de perder jugaron su mejor partido en defensa. Vi a los chicos llorando de bronca y angustiados por la impotencia, y casi lloro yo también, mas cuando Simón era uno de los mas afectados. Cuando pudimos conversar y sacar conclusiones, vimos todo mas claro y asumir una derrota, levantarse y salir de nuevo a jugar, no es poco…es muchísimo.
Por que probablemente sea una situación que vivamos dentro y fuera de la cancha muchas veces.
El último partido del sábado fue Trinity y también los superamos contundentemente.
Tenemos que estar orgullosos de estos chicos, de cómo juegan, de cómo sienten la camiseta, de lo que están formando, del compañerismo, etc.
Mención aparte para laurencio y Santiago que no podían jugar pero insistieron en ir igual a ver a sus amigos.(pasa seguido esto?).
El domingo le pegamos una paliza a Mar del Plata y otra a Sporting, por si importara, y la bandera fue el tackle…lo que habían aprendido el día anterior contra Pucara.
Esta es la segunda lectura de un fin de semana que fue increíble y van….
Con esta base se puede soñar despierto y con fundamento.
Y en eso estoy…..que no nos despierten, es la fiebre M-8.
Muchas gracias
José Martinelli
Entrenador M-8
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